Ella se lo dedicó a sus compañeros de grupo de primer ciclo que le dijeron Tú no puedes dirigir, y decidieron que lo debía hacer un hombre.
La intención de este Festival es poner de relieve el trabajo de las realizadoras peruanas mujeres jóvenes. Porque en el 2017, de 54 películas estrenadas, solo 5 fueron dirigidas por mujeres. Y los roles en los que principalmente han trabajado las mujeres han sido maquillaje, vestuario, producción,… roles vinculados a las labores asignadas a la mujer.
No se trata que el talento dependa de un género sino de motivar a las mujeres y brindarles las oportunidades. Es un proceso largo. Hace 70 años las mujeres en el Perú ni votaban.
En las aulas de clase yo sí he evidenciado un machismo, no necesariamente de los profesores o la institución educativa, sino de los compañeros e incluso de las propias compañeras mujeres, que asumían que lo técnico solo debía ser desempeñado por el varón. Por mi parte, yo era insistente con mis profesores en querer aprender lo técnico puesto que he pasado seis años estudiando Derecho, y de hecho, es un reto poder acoplarme cada vez más a lo técnico, porque por una razón decidí apostar por ser comunicadora audiovisual.
Tener 25 años a más nos hace buscar realizar nuestros trabajos en serio. Hacer las cosas por cumplir no inspiran. Felizmente, en los últimos ciclos las cosas fueron mejorando..
En mi mente, como la de cualquier soñadora, hay más de una docena de proyectos loquísimos y grandes, los pienso realizar de todas formas. El vídeo que presenté para este festival en realidad fue como algo del destino, lo denomino extraño porque en teoría es simple y a la vez conceptual.
En el curso de Dirección de Arte, surgió la oportunidad de hacer un fashiofilm de una marca. Mi profesora Sandrita Fernandez del Río me permitió hacerlo sola. Hice la investigación, entrevisté a la diseñadora Qarla Quispe. Obviamente tenía que romperme la cabeza y armar varios borradores. Mi mayor preocupación fue el manejo del color. Qarla me dijo, solo observa la naturaleza, y ahí encontrarás la respuesta. Esa respuesta fue crucial. Surgió la idea, con poco puedes hacer mucho, y ya está. Un collage de cosas. Tres horas de edición relámpago. El resultado fue un videoarte de un minuto y medio con la música instrumental de Anita Tjoux – 1970. Fue muy sorpresivo obtener críticas positivas.
Mi familia no entiende el significado del vídeo pero me apoyan al final de cuentas. Lo genial es que es la primera vez que compartiré un trabajo audiovisual con un público de realizadores y un público abierto. Esto nos motivará a seguir creando.